Pues esto sucedió antes de que me casara, digamos que fue como mi despedida
de soltera. Yo era maestra en una escuela secundaria. En dicha escuela luego
cada grupo tenia un maestro encargado, en mi caso era la encargada del 1ro B.
Tuve buena química con ellos, era un grupo algo caótico, pero supe controlarlos.
En esos tiempos era más fácil organizar excursiones, llevarlos a comer etc. Eso
les daba como premio por comportarse.
Pues ya iba a dejar el trabajo de maestra. En un julio iba a terminar el
curso ya siendo el ultimo para mí y en agosto me casaba. Además, que nos íbamos
a mudar de ciudad después de la boda. Como despedida los alumnos me organizaron
una fiesta, al principio en la escuela. Pero aprovechando que era fin de curso,
les propuse combinar mi fiesta de despedida con la de ellos. Igual ellos se
verían en segundo, pero era por diversión. Así que igual apoyé un poco. Con
conectes de mi esposo, en ese entonces mi prometido, conseguimos un local
barato y con descuento. Tenia piscina no tan profunda y una palapa. Lo hicimos
de día para no tener problema con los papas. Eran bastantes alumnos, como 50,
pues ya saben escuela pública. Pero no todos fueron, algunos no obtuvieron el
permiso, otros prefirieron no ir.
Llevamos comida, música, los chicos divirtiéndose. Como en toda escuela había
grupitos separados. Algunos comenzaron a irse después de unas horas. Pero llegó
la hora de la piscina, algunos llevaban sus trajes de baño. Yo sabiendo que estaba
de salida iba a dejar el puesto de maestra y de ciudad pues quise hacer algo
loco. Me puse un traje de baño muy llamativo, tanguita de hilo mostrando mis
nalgotas. Mi intención no era coger, solo calentar y que me recordaran como la
maestra culona. Y es que los adolescentes siempre recuerdan eso toda su vida.
Pues ahí paseándome en tanga, meneando nalgas. A algunos se les paró abajo
su traje de baño. Yo en lo mío, dándoles mas sándwiches, charlando con ellos,
las niñas murmurando. Unas que ya tenían su noviecito entre sus compañeros,
decidieron irse con ellos jajaja. Hasta aquel momento, era la experiencia mas erótica
que había tenido. Me inclinaba, me gustaba como me miraban. Algunos hasta se
iban al baño seguramente a jalársela. Tuve que sentarme un momento de lo mojada
que tenia la panocha. Acepto que, si me arriesgue mucho, pero no andaba
pensando con claridad.
Luego había un trampolín donde me subí a saltar como niña. Cuando me di
cuenta algunos alumnos brincando conmigo. Se me caían encima y si sentí
manoseos en mis nalgas. En una de esas uno hasta cayo con la cara en mi culo
abierto mientras yo me levantaba. Sentí hasta su nariz, y me dijo —Perdon profa.
Le dije que no pasaba nada, que se divirtiera. Hice como que me rompí la uña, y
asi andaba en cuatro revisándomela, solo para que me vieran el culo. Fue cuando
vi que las niñas se iban, creo que fue demasiado para ellas. Algunas hasta me
miraban con cara de asco jajaja. Pero los chicos se quedaron, algunos
disfrutando al show.
Sin embargo, todos estaban nerviosos. Incluso los más latosos y pues deduje
que la mayoría si no es que todos eran vírgenes. Yo ya andaba caliente, ya con
solo chicos esperaba que alguno tomara la iniciativa, pero no.
Ya no aguanté más y me hice un lado la tanga, toda húmeda que hasta me goteaba
la panocha. Los miré y les dije —¿Quién se anima a cogerme primero? —quisiera
decirles que comenzó un rico gangbang pero no.
Resulta un chico llamado José comienza a gritarme —¡maestra puerca! Eso se
lo voy a decir a mis papas. No tomé en cuenta a Jose, el niño aplicado, el que
me recordaba la tarea y me cuestionaba cuando le ponía 9 en su examen.
Sus compañeros como que se enojaron con él, pero no lo expresaron. Ya me acomodé
nuevamente la tanga, fui a hablar con José pidiéndole perdón, no lo pensé y que
ya me iba a comportar. Claramente el chico era gay por lo que tenia todas las
de perder con él. Pero ¿creerán que me chantajeó? Jajaja recuerdo que me pidió que
le comprara un playstation 2 con dos juegos que no recuerdo.
Entonces unas manos frías y nerviosas comenzaron a bajarme la tanga
diciendo —no le haga caso profe. Me volteé y uno me agarró de la cintura y comenzó
a besarme los pechos. Al fin se habían animado, sentí besos en mis nalgas. Y el
Mendigo José comenzó a grabar, uno de sus compañeros le arrebató el celular y
lo aventó a la piscina. Otro le dio un puñetazo en la cara y comenzó a
descontrolarse, todos contra el pobre José. Otros no querían que me fuera a
detener a sus compañeros, sacaban sus penes diciendo, —Déjelos profa, sigamos
aquí.
No podía creer que se estuvieran comportando como animales. Pero me puse en
medio regañándolos, el pobre José ya con la nariz sangrando y un ojo morado. Tuve
que vestirme y decirles que se terminaba la fiesta y tuve que llevar a José a un
médico. En el camino afortunadamente lo convencí de no decir nada y no tuve que
darle nada. Solo la promesa de que con lo que hizo seguramente sus compañeros
le harían bulling todo el tiempo y que yo los convencería de no molestarlo.
Saliendo de la cruz roja lo lleve a su casa, tuve que decirles a sus papas
que su hijo se peleó con otro chico, pero que yo me encargaría de que lo
sancionen. Los papas muy comprensivos de —son pleitos de chamacos, asi se aprende
para la vida.
En eso me llama mi entonces prometido, diciendo que me buscaban algunos
alumnos en la casa. Y es que, aunque no nos habíamos casado, teníamos un año de
vivir juntos. Si me asusté y fui casi volando. Llegando parecía un mitin afuera.
Les pregunté qué hacían ahí, me dijeron que para ver si podíamos seguir con lo
que José arruinó. Y mi prometido desde siempre muy amable, me dice hazlos
pasar, se ve que te extrañaran. Y ahí todos entrando yo preocupada.
Algunos llevaron en bolsas comida que ya tenían del convivio. Ahí se
pusieron a comer platicando, pero mirándome. Mi prometido platicando un poco
con ellos, pero en la cocina le dije, —amor que te parece si nos dejas solos
unas horas, quiero hablar con ellos y despedirme y darles algunos consejos.
—Muy amable me dijo que estaba bien, que iría a ver una película al cine para
darnos el espacio. Y asi agarró el coche y se fue.
Apenas se marchó comencé a desnudarme, bajarme la tanga diciéndoles, —tenemos
tres horas más o menos para que me cojan, son un montón, los que puedan en ese
tiempo. Pero se me ocurrió para que no se descontrolen de nuevo, cronometrarlos.
Alguien tomando el tiempo, 5 minutos cambiaban. Todos estuvieron de acuerdo, emocionada
me puse en cuatro sobre el sofá y ellos atrás en fila. El primero hasta contemplo
mi culo unos segundos, luego comenzó a meterme su verga adolecente.
Yo estaba cumpliendo una fantasía, estaba mojada y disfrutando. Y algunos
le preguntaban a su compañero —¿Qué se siente? Y el —¡delicioso!
Yo gimiendo diciéndole, —disfruta bebé. —los cinco minutos pasaban rapidísimo.
Pasaba el siguiente, yo mordiendo un cojín pidiéndoles que me cogieran mas
duro. Les decía, va a ser la última lección que aprenderán de mí. Conforme pasaban,
pues mas me calentaba y mi panocha mas se mojaba y contraía. El cuarto chico,
como a los 2 minutos no aguantó y me hecho toda su leche dentro de la panocha.
Lo rico que no pasó, como un minuto más siguió erecto penetrándome, sonando
como chancla mojada jajaj cuando entraba su verga embarrada de semen.
Tuvimos que hacer una pausa y los demás reclamándole que hizo que se
perdiera tiempo. Tuve que ir al baño, lavarme, con un lavado me saqué el semen
de dentro. Como 15 minutos en eso. Regresé y ellos mismos acordaron no correrse
dentro. Les dije que para no perder tiempo, unos hicieran fila adelante para
que se las chupara.
Asi como puta porno, fila atrás y
fila adelante. Perdí la cuenta, uno quiso metérmela por el culo. No se en que
numero de chico yo me corrí mojándole la verga. Pero como si fuera agua de
coco, todos querían lamiar mi agüita para sentir el sabor y el aroma. Lenguas y
chupetones, dedos metiéndose y yo me corrí de nuevo aajaja. Recuerdo que había
alguien lamiando, le agarré la cabeza y se la hundí en mi panocha mientras lo
empapaba.
Yo tenia mi propio cronometro. Tres horas pasaron, yo me corrí como 5 veces.
Igual mi concha no podía mas, ya la tenía bien sensible. Afortunadamente a
todos les tocó, aunque la mayoría no se corrió. Pero les dije sorry, ya no
podemos seguir.
Tuvieron que irse con la promesa de que mientras siguiera en la ciudad repetiríamos.
Una semana no quise coger, la panocha toda débil por las mil batallas. Me dio
hasta un desgarre que tuve que ir al ginecólogo. Mi ginecólogo de ese tiempo
era un amigo gay, que con toda confianza me dijo, —es como si te hubieran
violado multiple veces, ¿estas bien? —y yo de, si no te preocupes.
Todo delicioso, pero si de casualidad una chica lee esto, no se los
recomiendo. Es como una borrachera, divertida al momento, pero la cruda no se
aguanta. Luego me daban dolores en la panocha, solo el rose del calzón me
incomodaba, todo horrible jajaa.
Pues de ahí los chicos me llamaban. A las dos semanas solo vi como a cinco,
cogí con ellos por separado. De ahí fue la boda y a los dos dias la mudanza y
ya no supe más. Y tuve una despedida aburrida con amigas, tías y primas. Pero
para mí, la despedida épica fue ese día de la cogida múltiple. He cogido con
muchos al mismo tiempo, pero no a ese grado. No lo repetí mas por miedo jajaja
a los efectos secundarios.
Que rica metida de verga te dieron, super caliente y puta la profa
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